Skip to main content

El espejismo de Corvera

Podríamos por tanto cifrar en unos cien millones de euros los beneficios que generaría Corvera en los veinticinco años de explotación, que comparados con los más de trescientos que ha costado a las arcas públicas por diferentes conceptos, arroja un saldo de setenta y cinco años necesarios solo para recuperar la inversión inicial.

Quienes concibieron el proyecto del Aeropuerto Internacional de Murcia habrán podido presumir de un visionario acierto comprobando su funcionamiento durante los días en que ha permanecido cerrado el aeropuerto de El Altet. Han sido 235 operaciones de vuelo en cinco días, cuando habitualmente se producen entre cinco y seis diarias.

No ha desaprovechado la oportunidad el Gobierno regional, como era de esperar, para sacar de nuevo el argumento de la necesidad de este aeropuerto en la Región de Murcia, confundiendo la realidad con el deseo, inflado el mensaje además, por las noticias previas, que anunciaban los primeros beneficios derivados del contrato de explotación. Pero, al igual que la carroza volvió a ser calabaza, Corvera volvió a ser Corvera tras el espejismo de estos días, como si se tratase de una performance, de lo que algunos querrían que fuera y difícilmente será.

Así, en lo que a los beneficios se refiere, la CARM recibirá, según contrato, 0,84 euros por pasajero, en concepto de canon, a partir del millón cada uno de los diez primeros años, y un canon mínimo de 4,78 millones cada año del undécimo al décimo quinto, de 5,7 millones del décimo sexto al vigésimo, de 6,9 millones del vigésimo primero al vigésimo cuarto y de 5,1 millones el vigésimo quinto y último año de la concesión: unos 95 millones para todo el periodo, que podrían incrementarse en el improbable caso de que se superen 2,3 millones de pasajeros cada año a partir del undécimo de explotación, 2,5 millomes a partir del décimo quinto y 2,7 a partir del vigésimo.

El tráfico de mercancías podría suponer también un beneficio añadido del 10% de la cantidad percibida por dicho tránsito, si se superan las 50.000 toneladas anuales, previsión más optimista e improbable aun que la de pasajeros. Resumiendo, podríamos por tanto cifrar en unos cien millones de euros los beneficios que generaría Corvera en los veinticinco años de explotación, que comparados con los más de trescientos que ha costado a las arcas públicas por diferentes conceptos, arroja un saldo de setenta y cinco años necesarios solo para recuperar la inversión inicial.

Quizás desde esta óptica y otras parecidas, entendamos mejor por qué la deuda pública de la CARM se aproxima a los 10.ooo millones de euros con un crecimiento sin control, y que solo una parte y no mayor, se debe a la infrafinanciación autonómica.

Fuente: laopiniondemurcia.es